Dos años y medio demoró el proyecto de Ley en pasar por el Legislativo y luego el Tribunal Constitucional. La mandataria declaró que «es un día histórico» para las mujeres.
Este jueves la Presidenta Bachelet promulgó la ley 21.030 que despenaliza la interrupción del embarazo voluntario en tres causales, las cuales son: riesgo en la vida de la madre, inviabilidad fetal producto de una patología congénita y en caso de violación.
La iniciativa fue una de las propuestas más importantes del Gobierno de Michelle Bachelet, por lo que en su discurso la presidenta se mostró muy orgullosa de este gran paso, aludiendo a que finalmente se está firmando la ley que consagra el derecho de la mujer a decidir sobre su propio cuerpo.
Por su parte, la ministra de Salud, Carmen Castillo, explicó que tras la promulgación de la ley, se ha puesto en marcha el proceso para implementar la medida en todo el país, e irá paulatinamente avanzando por el territorio nacional.
El proyecto de ley fue enviado el 31 de enero del 2015 al Congreso, y tras dos años y ocho meses de que fuera presentada, finalmente se firmó en una ceremonia que se llevó a cabo al mediodía en La Moneda, la cual convocó a más de mil personas en el patio de Los Naranjos y que, además, contó con la presencia de los candidatos presidenciales Carolina Goic, Alejandro Guiller, Marco Enríquez-Ominami y Alejandro Navarro.
Finalmente, el 21 de agosto el Tribunal Constitucional dio el visto bueno al proyecto que despenaliza el aborto en tres causales, luego de desestimar los dos requerimientos presentados por Chile Vamos. Además, se impugnó el estatuto que amplía la objeción de conciencia a las instituciones de salud, ya que antes solo aplicaba al equipo médico. En el caso de que la mujer requiera atención médica urgente, la objeción de conciencia perdería su validez, priorizando la vida de la madre.
La iniciativa comenzará a regir a partir de diciembre de este año, tras lo cual se dará a conocer el reglamento que está siendo elaborado por el Ministerio de Salud con respecto esta objeción.