Con la presencia de autoridades nacionales e internacionales, la FILSA 2024 dio inicio, el viernes 8 de noviembre, a una nueva edición repleta de actividades culturales, literarias y artísticas. Desde el pabellón de China como país invitado hasta presentaciones de libros y danzas tradicionales, la feria promete una experiencia única para todos los amantes de la literatura y la cultura.

Por: Catalina Reyes

Eran las 11 de la mañana y en la entrada del Centro Cultural Mapocho se encontraban cursos de estudiantes de todas las edades, jóvenes y adultos, aguardando por la apertura de la 43ª Feria Internacional del Libro de Santiago (FILSA). Se oían murmullos y risas mientras los distintos grupos hacían fila y esperaban por su ingreso.

Abrieron las puertas. Los estudiantes gritaron de emoción, mientras que los más grandes aguardaban su turno de ingresar. Una vez adentro, los visitantes se dispersaron por los múltiples rincones de la feria, explorando los distintos stands que se encontraban en el lugar. Algunos se dirigieron primero al puesto que se encontraba en la entrada, Panini, en busca de álbumes antiguos; otros se paseaban entre las tiendas de literatura juvenil e infantil, los puestos con libros temáticos de aves o botánica, y las tiendas de cómics, cuadros y diarios antiguos. Otros también fueron a los stands que ofrecían programas educativos, como el KOE, una plataforma para aprender inglés.

Uno de los espacios más concurridos fue el pabellón del País Invitado de Honor, China. En este pabellón, los visitantes encontraban una amplia colección de libros escritos y traducidos al chino, además de cuadros y decoraciones representativas de la tradición artística de China. Al fondo, en un pequeño escenario, artistas chinos realizaban presentaciones de música y danza tradicionales.

A la 1 de la tarde, en la Sala de las Artes, comenzó la ceremonia oficial de inauguración. Eduardo Castillo, presidente de la Cámara Chilena del Libro, dio la bienvenida: ¨Dejar invitados a todos en esta fiesta, esta fiesta que nunca sabemos y podemos describir porque cada persona y cada uno de los niños que vieron acá afuera se lleva su propia feria en el imaginario¨, expresó.

A continuación, la alcaldesa de Santiago, Irací Hassler, y la presidenta de la Cámara de Diputados, Karol Cariola, dieron la bienvenida a los invitados provenientes de Latinoamérica y al País Invitado de Honor. El ministro de China, Hon. HU Heping, agradeció el cálido recibimiento con la ayuda de una traductora en vivo y presentó a las autoridades que lo acompañaban en esta ocasión.

Finalmente, la ministra de Cultura, Carolina Arredondo, destacó el papel de la FILSA en el fomento de la industria editorial nacional y en la promoción de obras y autores chilenos en el exterior. Aprovechó la oportunidad, y la presencia de la presidenta de la Cámara de Diputados, para hacer un llamado a los parlamentarios a apoyar leyes que impulsen las culturas en Chile. La ceremonia concluyó con el tradicional corte de cinta, en el que participaron todas las autoridades presentes, quienes visitaron juntos el Pabellón Chino.

El resto del día, la feria fue recibiendo a más visitantes jóvenes, adultos y familias completas, que recorrían los stands, admiraban los actos culturales chinos, como una danza del dragón y presentaciones folclórica, y asistían a lanzamientos de libros como Budismo Moderno de Venerable Kelsang y Pensamiento nacionalista en Chile.

La FILSA estará abierta hasta el 17 de noviembre, de 11:00 a 20:30 horas, con entrada liberada de lunes a jueves y un costo de $4500 para mayores de 12 años de viernes a domingo. Quedan todos invitados a ser parte de esta experiencia y a explorar el mundo literario, cultural y artístico que la FILSA ha preparado para este año.