La decisión de adelantar las elecciones FEUC ha generado un intenso debate dentro de la comunidad estudiantil. Mientras la directiva de la Federación justifica el cambio por razones prácticas y busca facilitar la participación en un contexto complejo, sus críticos acusan falta de transparencia y aseguran que la decisión no fue suficientemente discutida con todos los actores involucrados. El adelanto aprobado por el Consejo Ejecutivo ha puesto sobre la mesa un delicado equilibrio entre cumplir con los estatutos y asegurar una participación estudiantil efectiva en un proceso que, para algunos, ha sido apresurado. 

Por: Tomás Ferrada y Constanza Cartes.

Un correo enviado por la presidenta de la Federación de Estudiantes UC, Catalina Jofré (NAU), confirmaba la propuesta de la directiva para fijar las fechas de las elecciones FEUC de este año. Los días escogidos serían el 8 y el 9 de octubre, y la eventual segunda vuelta el 22 y 23 del mismo mes. Adicionalmente, la presidenta propuso facultar al Tribunal Calificador de Elecciones (TRICEL) para añadir un día extra a la votación si, al finalizar el segundo día, no se alcanzase el quórum del 50% de participación exigido para validar el proceso.

Este miércoles 4 de septiembre en una sesión extraordinaria, el Consejo Ejecutivo aprobó la moción con 23 votos a favor y 13 en contra. Los movimientos NAU, Solidaridad y Gremial aprobaron, mientras que las Juventudes Comunistas (JJ.CC.), Surgencia, Frente Amplio y Avanzar se opusieron. 

Las fechas escogidas difieren de la tradición de los últimos años, cuando las elecciones se llevaban a cabo a finales de octubre y principios de noviembre. Según la directiva de la Federación, las razones son prácticas: de hacerlo más tarde el proceso se toparía con los feriados del 31 de octubre y 1 de noviembre, y con las elecciones regionales y municipales del 26 y 27. Además, Moira Cortés, Consejera Territorial de Humanidades de la Nueva Acción Universitaria, reconoce que las fechas se eligieron “pensando en que a inicios de octubre hay más estudiantes en los campus. La decisión se toma principal y esencialmente por eso”. 

La propuesta de la Nueva Acción Universitaria encontró apoyo en sus mayores adversarios políticos: Solidaridad y Movimiento Gremial. Emilia Cifuentes, CT de Derecho de Solidaridad, argumentó que no podía realizarse el proceso a finales de octubre, pues se toparía con las municipales y “la gente, como sabemos, se cansa de tanto votar. Debemos plantear las mayores facilidades posibles para que el estudiantado vaya a votar”. Cifuentes señaló que a principios de noviembre los estudiantes ya no asisten tanto a la universidad por estar preparando sus evaluaciones finales, por lo que “no hay nadie que les esté prestando real atención a algo que es tan importante”. La CT del Movimiento Gremial del mismo territorio, Ignacia Mackenna, señala que estas fechas fueron conversadas entre la FEUC y la administración de la UC y que “hay todo un estudio por detrás que respalda que hay más gente en la universidad en esas fechas”.  

Por otro lado, los movimientos que rechazaron esta fórmula señalan que las fechas no fueron conversadas con todos los agentes involucrados. “Las fechas no se conversaron con otros movimientos. Y si bien la federación conversó con algunos centros de estudiantes, territorios más pequeños fueron dejados de lado de estas conversaciones”, señaló Ro Zuleta, encargada política del Frente Amplio UC. Javiera Faúndez, CT de Ciencias de la Salud por Avanzar, coincide: “Esto se hizo sin previa conversación o aviso al resto de los movimientos que no fuera Solidaridad y la NAU. A nuestro parecer, esto complica a todos los otros movimientos”.  

Batalla contra el tiempo 

Uno de los puntos que se tomó la sesión del consejo ayer fueron los plazos para cumplir con los estatutos. Según la reforma transitoria para realizar el proceso eleccionario, el Consejo Ejecutivo deberá determinar el número de escaños de Consejerías Territoriales “a los menos veinte días hábiles antes de realizarse las elecciones”, situación que complica al Consejo, ya que la Dirección de Asuntos Estudiantiles aun no ha entregado la nómina oficial, siendo un documento clave para definir los escaños. Inicialmente, el cálculo realizado en la sesión de ayer significaba que el Consejo debía aprobar los escaños por territorio a más tardar este viernes 6. Sin embargo, tras interpretar como “día hábil” los sábados (considerado en Chile como día hábil para efectos legales y administrativos), el plazo se fijó para el miércoles 11 de septiembre.  

Emilia Cifuentes (Solidaridad) reconoce que los plazos están muy encima y que “no permite que los Centros de Estudiantes se puedan organizar”. Señala que la FEUC “debió transparentar las fechas mucho antes”, pero que “eso no quita que todavía queda un mes. El desafío más grande es el quórum y creo que todos tenemos que hacer esfuerzos”. Por su parte, Faúndez, de Avanzar, menciona un último punto que añade una complicación extra: “Las elecciones coinciden con la Expo Futuro Novato (8 al 10 de octubre en San Joaquín). Entonces va a ser un enredo tremendo”. 

En definitiva, de acuerdo con lo aprobado por el Consejo Ejecutivo este miércoles 4 de septiembre, el cronograma para la primera vuelta quedó de la siguiente forma: 

 

  • 23 al 27 de septiembre: recolección de firmas.
  • 30 de septiembre al 4 de octubre: campaña.
  • 8 y 9 de octubre: Elecciones FEUC 2025.