Esta mañana el presidente Sebastián Piñera junto al ministro de Educación, Gerardo Varela, firmaron el proyecto de ley para la creación de un nuevo Sistema de Financiamiento Solidario que implicaría el fin al Crédito con Aval del Estado (CAE) y Fondo Solidario de Créditos Universitarios (FSCU), en línea con el compromiso particular que hizo el mandatario en su primera Cuenta Pública ante el Congreso Pleno.
Se trata del Sistema de Financiamiento Solidario (SFS) que será administrado por el Estado, sin participación de la banca y contempla un plazo máximo a pagar de 15 años. Un pago con cuotas que no podrán ser mayores al 10% de los ingresos. La autoridad explicó que el nuevo sistema estará disponible para todos los estudiantes que pertenezcan a los nueve primeros deciles de ingresos y accedan a instituciones de Educación Superior acreditadas.
El Jefe de Estado señaló que “todos los deudores actuales del CAE y fondo solidario podrán acogerse voluntariamente” al nuevo sistema, añadiendo que el anuncio “es solo un paso y no agota nuestro desafío ni misión ni nuestro compromiso».
Quienes decidan acogerse al crédito deberán tener al menos 475 puntos promedio en la PSU, mientras que quienes ingresan a un Centro de Formación Técnica (CFT) o Instituto Profesional (IP) deberán acreditar el haber obtenido un promedio NEM superior a 5,3 o pertenecer al 50% superior de su promoción o ranking. Por su parte, los alumnos que pertenezcan al 60% de las familias más vulnerables no pagarán mientras están estudiando, con el deber de las instituciones de pagar la diferencia.
Por su parte el ministro de Educación, Gerardo Varela hizo énfasis en las diferencias entre el proyecto del actual Gobierno y el anterior presentado bajo el mandato de Michelle Bachelet, señalando que el anterior sistema cubría hasta una vez el arancel, mientras que el actual se extiende hasta en 1,5 veces.
El anuncio va en línea con las prioridades del gobierno en materia de educación: mejorar la calidad en los distintos segmentos y etapas del sistema educacional, mejorar la calidad de la educación técnico-profesional y hacer un cambio drástico en el sistema de capacitación. El ministro Secretario General de la Presidencia, Gonzalo Blumel reconoció la importancia del nuevo proyecto destacando «que este es un cambio de fondo que establece un complemento positivo a la gratuidad, porque es la base para el resto que no puede acceder puesto que «esta no tiene solución afectiva y justa».
Y añadió que establece «una tasa baja , una condonación después de 15 años. Si no tiene sueldo no paga, y si gana menos del mínimo tampoco». Además, hizo un emplazamiento a la Nueva Mayoría y el Frente Amplio para que se apruebe rápidamente.
La instancia prevé que beneficiará a 300 mil estudiantes del país, quienes podrían recibir la condenación de toda la deuda al momento que pase la extensión de la misma. Sin embargo, la forma cómo se solucionará se mantiene abierta, puesto que todavía no se ha determinado la institución dependiente del Estado que se hará cargo del nuevo sistema y los tipos de multas para los morosos.