Harry Styles, el ícono pop del momento que no se deja restringir por los esteriotipos de genero instaldos en la sociedad actual. El cantante a través de estilo único y música soft rock esta redefiniendo el concepto tradicional de masculinidad, que cada vez queda más en el olvido.

Por Carla Alvarado y Josefina Muñiz

En un mundo en el que la sociedad que nos ha criado nos ha enseñado que existen determinados objetos o estilos asociados a cada género, casos que sobresalgan de los límites llaman mucho la atención. Se hace extraño y quizás hasta podría ser rechazado el uso de prendas “femeninas” en un hombre o “masculinas” en una mujer, cantantes hombres que expresen sus sentimientos, uñas pintadas en cualquier persona, etc. Sin embargo, Harry Edward Styles es el ejemplo perfecto que muestra que con un poco de actitud y una pizca de autoestima, se puede lucir y hacer cualquier cosa sin ajustarse a ningún estereotipo.

Samuel Bradley, The Guardian

Nacido en el pequeño pueblo de Evesham en 1994, partió su carrera como cantante cuando a los 16 años fue unido junto a otros 4 jóvenes en The X Factor a la famosa banda One Direction. Sus ojos verdes y su pelo ondulado no tardaron en llamar la atención, y su timidez fue rápidamente explotada y contrastada hacia lo que sería un sex symbol. Su sonrisa de oreja a oreja, sus posteriores tatuajes y su ropa negra y apretada fueron encajados en una personalidad que la prensa retrataba como mujeriego, donde cada mujer que figuraba cerca de él parecía ser una nueva conquista amorosa. Además, su música poseía un público objetivo: las adolescentes, lo cual se vio reflejado en la letra y el ritmo de cada canción que llevó a él y a la banda hacia la cima.

Harry Styles en 2013 en la final de X- Factor

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Pero todo cambió tras la separación en 2015, donde Harry fue revelando con el tiempo su verdadero interior: por un lado, sus canciones comenzaron a romper las barreras de un pop rosado para comenzar con algo más soft rock, lo cual lo llevó a distintas nominaciones, dos álbumes e incluso a ser una de las 20 personas más escuchadas en el mundo por Spotify. Y por otro lado, sus jeans ceñidos, botas y camisas oscuras fueron reemplazadas con un estilo completamente distinto: lo genderfluid. Sin temor a nada, comenzó a presentarse en eventos importantes con encaje, tacones y hasta las uñas pintadas. Eventualmente, este estilo fue incorporado hasta su vida diaria, y tras el paso del tiempo, llegó a un nivel de comodidad que lo llevó a protagonizar portadas importantes de revistas como Vogue o The Guardian en vestidos, faldas, maquillaje, etc. En la siguiente linea de tiempo se puede ver su evolución de su estilo.

Y es que Harry Styles no cree en las barreras para ser femenino ni masculino, y pese a no ser el único exponente de este pensamiento, ha llegado a ser una gran base representativa de este movimiento que va expandiéndose a distintos ámbitos a lo largo de los años. Ha utilizado su fama constantemente creciente para ser quien realmente siente que es ante todo, motivando al resto a hacer lo mismo. Su caso demuestra la importancia de jamás perder la esencia y dejar el pensamiento pasado de que hay cosas para mujeres y cosas para hombres: es todo un estereotipo errado. Los invitamos entonces a escuchar el siguiente reportaje, donde se profundiza el especial caso genderfluid del cantante británico que se ha robado todos los corazones de quien lo escuche: Harry Styles. 

Ahora haz el mini quiz de Harry Styles para ver cuando sabes del ídolo británico

 

 

Por Carla Alvarado y Josefina Muñiz